#029 (reescrito)

A M,
por dejarme volar.

He conocido a un chico
que te gana a brillo en los ojos.
Cierto es que llegó en mal momento, pues
la vida se encaprichó en que llegara rápido
y no acertó.

Siempre sentí
que me había hecho un pequeño hueco
en su complicada vida
por lo que gracias.

He conocido a un chico
con tantas peculiaridades
que nos quebraron
por no saber tratarlas
como merecían.

He conocido a un chico
aunque no sé a penas nada de él.
Te diré que tiene tanta coraza encima
como la que puedo llevar yo, a la luz del día.
Y te aseguro que pesa, que deja marcas.

He conocido a un chico
y la verdad es que
nunca escribí sobre él,
pero se merece que alguien lo haga.
Alguien que le quiera con locura.

Con tanta locura como posee dentro.
Locura absurda
que a veces le hace reír sólo a él.
Se merece alguien que le haga eterno.
Y esa no soy yo.

Porque él es de palabras complicadas,
palabras que yo me prohibí hace tiempo,
palabras que unen a siempre con eterna.
-Quizás él me entienda-.

He conocido a un chico
que me ha visto alas
cuando tú jamás supiste verlas.
He conocido a un chico
que cree merecerme
y no tiene ni puta idea.


Etna Suárez.

#053

A veces sueño que soy pájaro
Que me acaricias la libertad con los dedos
Que abro las alas entre tus costados
Y que me silbas melodías
hasta instalarme en tu pecho una vez alcanzado el cielo.

A veces sueño con ganas en fuga
Que impregnan como combustible el ambiente
Que provocan un incendio incandescente
Y que como siempre,
Rebosan en tus dientes delincuentes.

Etna Suárez

#052

No quiero adelantarme
es algo que aterroriza.
Quizá sea un error que no queremos ver
o la repetición de un patrón genético...

Cada vez que te pienso
las convenciones tambalean
y mi cabeza sufre un terremoto.

Tengo claro la dirección que marca el centro de mi pecho.
A veces pienso si es lo correcto y en seguida me doy cuenta
de que esa pregunta solo tiene respuesta
tras el resultado del acto y siempre

es mejor intentarlo.
Así que arriesguémonos
creemos, creamos que podemos.

Almacenemos momentos
amanezcamos cubiertos
de sudor y besos
Miremonos sin decirnos nada
que sobran las palabras

y tu luz
lo dice
todo.

Etna Suárez.

#051



Me has llamado bonita por dentro
has apreciado mi mirada
todavía no has hablado de magia
ni me has insultado truco.

Corremos el riesgo al caer en la tentación
pero lo prohibido nos muerde las ganas
y nos dejamos llevar.

Y es que crees
que soy todavía más
de lo que yo me siento
y en tu silencio

de garganta
me veo reflejada, en tu clara mirada
me ves tan bonito... que asusta.

No pierdas el tiempo intentando ocultarlo.
Se te ilumina la cara
cuando te fundes y me miras.
No lo escondas, me gusta.

Sólo ves con calma.
Aprendí que el futuro es incierto y nosotros indecisos,
que la mente lleva un ritmo que la vida no sigue
y que los planes pocas veces aterrizan.

que lo evidente no se puede dejar atrás
y esto
asusta.

Etna Suárez.

#050

He vuelto al blanco y negro. He perdido la risa. A mi mirada le faltan estrellas y siento la necesidad de huir. Pero no sé de qué, de quien, o de dónde.
Necesito irme por un tiempo, y a veces los vuelos más baratos -y no por ello de menor valor-, se encuentran entre los brazos de alguien y no hay ni que moverse del sitio para viajar. Pero necesito buscarle nombre a ese algo que me sobra o me falta y no hay brazos que me acojan el tiempo suficiente. Así que me voy. Y creo que durante ese tiempo, voy a intentar no saber nada de quién no esté delante mía. Voy a crear distancias. Que con tanta tecnología no sabemos qué es eso.
Cuando vuelva veré lo que me encuentro.
Supongo que lo que perdure, mereceré tenerlo.
Juro que voy a intentar llenarme los pulmones de aire y el alma de colores. Necesito encontrarme y volver a sentir que me elevo al caminar, sonreír por el simple hecho de estar viva cada día que pasa, morirme de ganas de hacer vivir a quienes me importan... Quiero ser algo así como un terremoto que arrasa con los problemas y tristezas... Que se los lleva y hace que no vuelvan...
Necesito ser todo eso de puertas hacia fuera pero también de puertas hacia dentro. Y ahí está el problema. 
Que me entra el miedo al meter la llave en la cerradura que da al interior, y descubrir que me han desvalijado. Miedo a que no me agrade lo que encuentro. Que no me agrade encontrarme. Que no me agrade yo. Y tener que renovarme entera... 
Que la vida nos lleva, y yo ahora mismo, no se hacía dónde me dirijo. 
Voy a darme por perdida. No me busquéis. Vuelvo en 7 días. Cuelgo el cartel de "he salido a buscarme, vuelvo enseguida".
Así que quien quiera, que después cuelgue el cartel de bienvenida.

Etna Suárez.

#049


Quiero colgarme girasoles en el pelo
hasta que el sol aparezca de nuevo por mi cabeza.
Dejar florecer todo mi cuerpo
y ser más primavera que nunca.

Ser un jodido jardín.

Tener una rosa entre las piernas.
La fragancia nocturna del jazmín
que me impregna por la calle
a las dos de la mañana
cuando vuelvo a casa.

Tener margaritas en los pechos,
vestir faldas de amapola,
teñirme la mirada de anémonas,
y soltar deseos por la boca
entre dientes de león.

Tener raíces cambiantes
y la simetría y geometría perfecta
de una dahlia en el ombligo.
Ser primavera constante
y no temerle al invierno.

Tener la certeza de que
si aparece persona fría
el calor de los girasoles en mi pelo
llegara hasta las ramas de mis brazos
para abrazar y hacer florecer.

Seguir amando
las fotos en blanco y negro
pero esta vez,
teniendo la vida pintada
de mil colores diferentes.

Poder mirarlas
y colorear los recuerdos que traigan
con la variedad que encuentre
en el circulo cromático
que será mi cuerpo.

Y nunca más temerme,
y quererme siempre,
siempre,
hasta en el más duro de los otoños,
hasta en el más frío de los inviernos.

Colgarme las veces que haga falta
girasoles en el pelo.
Dejar salir al sol por mi cabeza
y florecer.
Eso quiero.


Etna Suárez.





#048


A Christian, 
por ser haber sido
la mirada más triste 
que he visto hasta el momento.

Me cautivó su mirada triste y descubrí en ella 
que el sentido de la vida consistía en no perder jamás 
ese brillo en los ojos, con el que nacemos. 
Y entendí que para ello, 
había que rodearse de personas brillantes
de personas con luz... 
Y caí, en que ahora se encontraba allí abajo
porque en algún momento 
dejó de brillar con la mirada
y posiblemente tropezó.
Todos necesitamos luces en el camino
pero quien cae, necesita manos extendidas
que le alumbren.
Y a mí me encantaría decirle...
"Necesitas más de dos manos 
para salir, pero por lo pronto 
tienes las mías, bien extendidas
restándole porcentaje de imposible a la subida,
conmigo esperando en la salida, 
para besarte los ojos cerrados 
y que los abras para volver a caminar. 
Pero por favor no me hagas tropezar
no me lleves a las profundidades 
que prefiero ser tu luz y hacernos brillar
antes que apagarme contigo".
Me encantaría decirle... 
Pero no le digo.

Etna Suárez

#047




A mi querida Laura, 
por ser la inspiración 
en esa noche 
sentadas en un bordillo 
contemplando un vaso 
que se quedó hecho trizas.
Nacemos vacíos
pero llenos de ganas
de colapsar nuestros limites
hasta derramarnos.
Somos al nacer
como vasos de cristal
recién salidos de fábrica. 
Yo nací
sirviendo al mundo,
llenándome de los culines
que cada uno deja,
al pasar por aquí.
Pero hoy me he roto.
Me he pegado una patada
en el más absurdo de los descuidos
y me he vaciado.
Quedando y siendo, solo nada.
Aquello que fui hace años
y creía haber dejado de ser. 
Hoy he roto y he echado a llover
en el desierto que soy.
Y he descubierto que detrás
de mi cristal hecho trizas,
asoman los ojos de gente increíble
dispuesta a reparar contigo los rotos.
Porque aunque no eliminen las marcas
te enseñan que con las grietas
si brillas con luz propia,
reflejas en quien te mira
el dibujo más desigual y humano
que puede haber de uno mismo. 
Y dime
¿qué hay más bonito

que ser una completa imperfección?

-Etna Suárez

#046


He perdido el norte, 
la bala y la rusa, y todo 
a empezado a dar vueltas como una ruleta.
Estoy tirada en la orilla de un mar perdido, 
como aquel niño que un día fue noticia
-y hoy ya ha desaparecido-.
Así que si vienes a buscarme, 
hazlo en silencio
que no quiero ser comercio de penas.

Y si en tu búsqueda me encuentras, 
cuando todo deje de girar cual ruleta, 
silénciate que la rusa 
estaba en la bala 
dentro de la pistola 
que no disparé 
por querer estar viva. 
Jamás me cuentes que estuve apuntando al sur mientras yo estaba 
en el norte sintiéndome perdida. 

No me digas
que en realidad 
existía en mí la valentía a la vida. 
Porque si descubro que era engaño
más que pérdida, 
apretaré el gatillo.

#045

A R,
por ser el desliz
que más me hace reír
con su recuerdo.
El problema viene
cuando decides perderte 
en una pista de la cual 
no conoces ninguna ruta 
trazada a besos, 
y patinas. 
Porque patinas 
caes al blanco hielo 
que ha dejado de ser nieve
en el momento que deslizas, 
contactas
y ardes.
Porque el blanco hielo quema
cuando te impregna
dentro de tí
Y ahí,
es cuando nace el poema.

Etna Suárez.

#44

Búh.
Estoy rayada.
A rayas.
Camisa, alma,
pantalones, entrañas,
piel, pecho, venas...
Todo a rayas.
Verticales y horizontales.
Se cruzan ambas y se convierten en rejas.
En vallas.
Como en la frontera de África.

No caímos en las rejas y nos caímos en ellas.
Pensamos en rayadas, pero se nos olvidó
construir una salida de emergencia.
Y dime,
Con tanta linea recta
¿Cómo vamos a dibujar las curvas
de los puntos suspensivos?


Etna Suárez

#43

MIAU

Quiero vivir una vida contigo
entera, intensa;
y restársela a las 6 que me quedan
de las 7 con las que empecé.

Etna Suárez