#057

Hoy te iluminaba ante la oscuridad de la noche
un foco color azul.
La luz iba directa a ti
yo elegía la siguiente canción y me
giraba a mirarte.
En una de esas veces
en que tus ojos se
cruzaron con los míos
me invadió una evasión que me
plantó
en la cara
una sonrisa fugitiva y delatadora
de cuanto en tan poco te has calado.
Y creí notar que me brillaban los ojos
como nunca
en silencio...
Amor,
no hay dudas;
Te quiero sin limites
sin ataduras,
hasta que en mi alma
no quepa ya ni una pizquita más de amor
hasta que rebose y se desprenda
en dosis por mis labios cada vez que rocen
con los tuyos.
Hasta que todo el que pase por nuestro lado
sienta la necesidad de celebrar nuestro amor
cuando el brillo de tus ojos
se refleje en el cristal de mi pecho
e iluminemos juntos, toda la ciudad.

Etna Suárez.

#056

RECONCILIACIÓN CON LA POESÍA

Se me han perdido las palabras
de tanto escuchar banalidades
mi silencio ha invadido hasta mi
soledad
y ya no me hablo
ya no me escucho
no tengo tiempo.
Ahora observo
y he cambiado las palabras
por disparos con objetivo
tras la cámara; pues
no tengo tiempo.
Podría escribir sobre todo lo que ven mis ojos pero
no tengo tiempo.
Así que hago un click
et c'est fini...
Pues no tengo tiempo
pero tengo un miedo que me muerde las manos
cada vez que sujeto un bolígrafo
y que me tiende la escusa de
"no tienes tiempo"
para no dejarme ver que me tiemblan las piernas
cuando voy a escribir
por si plasmo a pecho descubierto
dando importancia a algo que quizá
vaya a desaparecer cuando gire la esquina.
Un temblor de piernas que prefiere prevenir a arrepentirse
arrepentirse.
Es verdad que las palabras curan
hacía tres meses que no escribía, pero
acaba de venirme una imagen a la cabeza
hay silencio
estoy sola
y esta vez si que me escucho
tengo cosas que decir
no me tiemblan las piernas
mi mano no tiene la marca de
ningunos dientes con sabor a miedo
la tinta encuentra palabras
y yo,
por fin,
tengo tiempo.

Etna Suárez.